miércoles, 15 de noviembre de 2017

CIRCUNSTANCIAS SOCIO POLÍTICAS DE LA NOVELA PICARESCA

               ¿Que circunstancias socio políticas explican de la novela picaresca en España?  
Razones de índole literaria: la lírica renacentista, así como la novela pastoril y caballeresca, solo admitían altos sentimientos como el honor, la gloria y el amor ideal. Las vulgares necesidades de la vida, las bajas pasiones y el dolor estaban ausentes de las obras literarias. El pícaro es una reacción, un negativo y reverso del pastor idealizado y del caballero, es un antihéroe ásperamente real.
“La picaresca es una reacción antiheroica, al derrumbarse la caballería y los mitos épicos. La originalidad española consistió en oponer a la traducción popularizada de lo heroico una crítica vulgar. EL mundo está visto de abajo arriba... toda escena exhibe la carencia total de heroísmo” (Américo Castro).
Cansado de los gestos heroicos y del amor idealizado sin erotismo sexual alguno, quiso el público obras que le mostraran la vida tal y como era en realidad. Pero estos factores literarios son menos importantes que los factores sociales, que eran el ambiente social y material de la España imperial. Este ambiente social de la picaresca se podría resumir como sigue: carácter inquieto y aventurero del español, provocado por las aventuras vividas en el descubrimiento y conquista de América, así como la aventura de sobrevivir en la España paupérrima del pícaro, eran material más fantástico que cualquier invento literario. Soldados y aventureros regresaban de las campañas bélicas del Emperador o de las empresas conquistadoras de América, arruinados o inválidos muchas veces, y se sumaban a los innumerables grupos de desarraigados, incapaces de someterse a una vida ordenada y monótona, tras haber vivido las aventuras más fantásticas.
A todo esto hay que añadir el tradicional menosprecio por toda actividad lucrativa o trabajo ordenado típico de las clases o castas expulsadas de España durante la Edad Media: judíos y moros, como puso de relieve Américo Castro.  Los campos estaban desiertos de gente que emigraba a América en busca de El Dorado y a las grandes ciudades a buscar puestos de trabajo al servicio de algún gran seños. De ahí la tendencia al parasitismo y la holgazanería, típicos de la picaresca. Los primeros reveses de las campañas bélicas del Emperador y el cansancio de la vida heroica hacía preguntarse si todo aquello, si todo el esfuerzo conquistador tenía algún provecho. Frente a los viejos entusiasmos imperiales de la Conquista, surge ahora un desengaño: ¿dónde estaba el oro de América, que necesitaba Carlos V para pagar sus deudas, contraídas en sus campañas bélicas en Europa? La riqueza del oro americano no había mejorado la vida y el nivel social del español corriente.
Se suele aducir otro aspecto de tipo sicológico: el sentimiento individualista y estoico del español que menospreciaba las comodidades materiales cuando las había que alcanzar mediante un trabajo ordenado y la búsqueda de la seguridad, rasgos aborrecidos por los “cristianos viejos”, que los veían como rasgos típicos de las castas expulsadas: judíos y moros. Dentro y fuera de la picaresca podemos encontrar este desprecio, cínico y antisocial del pícaro, desprecio por la vida industriosa y materialmente fructífera del comerciante o artesano.
“¡Qué linda cosa era y qué regalada” Sin dedal, hilo ni aguja, tenaza, martillo ni barrena ni otro algún instrumento tenía oficio y beneficio ... Era bocado sin hueso, ocupación holgada y libre de pesadumbre. Pensaba a veces en la vida de mis padres ... lo que carga el peso de la honra ... A cuánto está obligado el desventurado que de ella tiene que usar”, dirá más tarde Guzmán de Alfarache.
“Comía con sosiego, dormía con reposo, no me despertaban celos, no me molestaban deudores, no me pedían pan los hijos ni me molestaban criadas, se me daba tres pitos que bajase el Turco ni un clavo que subiera el Persiano. Echaba mi barriga al sol y me reía de la honra y el pundonor .... todas las demás son muertes y sólo es vida la del pícaro” (Estabillo González). “La vida del pícaro es vida, que las otras no merecen esta nombre ... si los ricos la gustasen, dejarían por ella sus haciendas, como hacían los antiguos filósofos ... porque la vida filosofal y la picarial es una misma” (H. de Luna).
“Qué gusto es andar desabrochado, con anchos y pardillos pantalones, y no con veinte cintas amarrado ... Sólo el pícaro muere bien logrado, que, desde que nació, nada desea, y ansí lo tiene todo acaudalado” (La vida del pícaro, 1601).
El pícaro se lanza a la vida de pícaro por cesión propia sin ser forzado por nadie a ello:
“Trece años o pocos más tendría Carriazo cuando, llevado de una inclinación picaresca, sin forzarle a ello algún mal tratamiento de sus padres, sólo por su gusto y antojo, se desgarró, como dicen los muchachos, de casa de sus padres, y se fue por ese mundo adelante, tan contento de la vida libre, que en las incomodidades y miserias de la vida del pícaro no echaba de manos la abundancia de la casa de su padre, ni el andar a pie le cansaba, ni el frío o el calor le enfadaba. Para él todos los tiempos del año eran dulce y templada primavera .... tan bien dormía en parvas como en colchones; dormía con tanto gusto en un pajar como entre sábanas de Holanda. Su sabiduría de pícaro era tal que pudiera leer cátedra de la facultad” (Cervantes: La ilustre fregona).
Este aspecto de renuncia cínico-estoica a la vida cómoda y ordenada de la literatura picaresca coincide con la literatura ascética y su desprecio por los bienes materiales, así como por su preocupación filosofante y moralizadora. A excepción del Lazarillo, las demás novelas picarescas son “ejemplares” en el sentido que están llenas de disertaciones morales y enseñanzas prácticas. El pícaro comunica al lector su experiencia de la vida, de la que no saca moralejas. La afinidad sicológica del pícaro y el místico es clara. En su manera de ver el mundo, el pícaro muestra una cisión del mundo mística. Como el místico, el pícaro no ve en la vida más que algo pasajero que no vale la pena de ser tomado muy en serio, y menos vale la pena dedicarle un gran esfuerzo. El pícaro está movido por un vacío interior, una insatisfacción fundamental. Esa insatisfacción hizo de unos conquistadores; de otros, guerreros; de otros, caballeros andantes; de otros, místicos; de otros, pícaros; y de algunos, Quijotes.
Algo tiene de trágico la novela picaresca: por debajo de las burlas y sátiras, se puede descubrir un fondo negro y triste, que la sombra del hambre hace aún más negro y triste. “El pícaro posee un grado de esa conformidad mística, de esa conformidad tan española, expresada en más de cien refranes de Sancho Panza, especie de senequismo estoico, que consiste en aceptar las cosas como vienen, distraerse y consolarse ... En la picaresca vemos rasgos del carácter nacional: individualismo, sobrevaloración constante de la persona por encima de los bienes materiales; la vida como aventura y experiencia constante; la ironía del escéptico; sentimiento de caducidad de todas las cosas terrenas; gusto por los contrastes violentos; la astucia como arma de defensa; sentido de la improvisación y odio al orden” (César Barja)

martes, 7 de noviembre de 2017

COMPOSICIÓN MAS IMPORTANTE DE LA LÍRICA CULTA DEL RENACIMIENTO

    ¿Cual es la composición mas importante de la lírica culta del renacimiento en España?

La lirica renacentista se puede dividir en cuatro géneros literarios:           
1.      Cancioneros y Romancero cuyo autor era anónimo debido a que era la lírica menos culta y tradicional.                      
2.      Sonetos y églogas cuyo autor más representativo en España es Garcilaso de la Vega.
3.      Odas cuyo autor más representativo es Fray Luis de León.
4.      Cantico espiritual en este caso el autor más representativo es San Juan de la Cruz.
 
La lírica renacentista se desarrolla durante el siglo XVI a causa de la aparición de esta nueva etapa llamada renacimiento. Es cierto que durante este periodo convivieron diferentes corrientes poéticas, pero lo más característico de la lírica de este periodo es la aparición de un movimiento llamado Petrarquismo el cual fue una corriente proveniente de la Toscana, Italia, la cual tenía como modelo el autor toscano Francesco de Petrarca cuyo estilo humanista fue imitado por primera vez en España en la Obra de Garcilaso de la Vega, Petrarca fue el modelo para multitud de autores de los siglos XVI y XVII aunque su legado nos ha llegado hasta la actualidad. Las características que diferenciaban a Francesco de Petrarca de los anteriores era el intento de expresar el amor que sentía hacia la dama de una forma personal e íntima y no codificada, es decir no siguiendo unos patrones predeterminados. Para él entonces el amor no era igual entre todos sino que era distinto según la persona y por lo tanto los autores que escribiesen sobre ese género debían expresarlo de diferente forma

¿CUALES SON LAS COMPOSICIONES POÉTICAS RENACENTISTAS?

          ¿Cuales son las composiciones poéticas renacentistas mas destacadas en España? 
Las relaciones políticas, guerreras, religiosas y literarias entre Italia y España desde la mitad del siglo XV, hicieron que existiera un amplio intercambio cultural entre estos dos países. El papado de dos ilustres valencianos, Calixto III y Alejandro VI, sirvió para estrechar las relaciones culturales entre Castilla, el Reino de Aragón, y Roma. En Italia se editaban o traducían las obras literarias españolas de mayor relieve, como el Amadís de GaulaLa CelestinaCárcel de Amor o las composiciones poéticas de Jorge Manriquee Íñigo López de Mendoza, Marqués de Santillana, así como las compilaciones de producciones populares como los villancicos y los romances. Otro tanto sucedía en España con obras italianas, como la Jerusalén liberada, de Torcuato Tasso.
Estas relaciones hispano-italianas fueron muy importantes, ya que llevaron a la Península las inquietudes y gustos que propiciaron el Renacimiento español

MOTIVOS LÍRICOS CARACTERÍSTICOS DE LA POESÍA RENACENTISTA

         ¿Cuales fueron los motivos líricos característicos de la poesía renacentista en España?
  • En cuanto a la métrica utilizada, se adoptan versos (endecasílabo y heptasílabo), la rima utilizada es consonante ya que a partir de la última vocal acentuada, todos los sonidos coinciden. Las estrofas (lira, silva, octava real, tercetos encadenados, soneto) procedentes de Italia.
  • Asimismo, aparecen géneros característicos como la égloga (los protagonistas son pastores idealizados), la oda (para asuntos graves) o la epístola (poema en forma de carta).
  • La lengua en esta época está dominada por la naturalidad y la sencillez, huyendo de la afectación, del amaneramiento y de la frase rebuscada. Así el léxico y la sintaxis serán sencillos.
  • Los temas preferidos por la poesía renacentista son, fundamentalmente, el amor, concebido desde el punto de vista platónico; la naturaleza, como algo idílico (bucolismo); la mitología, utilizada como tema central o como ornamento para un asunto amoroso y la belleza femenina, siguiendo siempre un mismo ideal clásico.
  • En relación con estos temas mencionados, existen varios tópicos renacentistas, tomados del mundo clásico algunos de ellos:
    • El Carpe Diem, cuya traducción sería «atrapa el día» o «aprovecha el momento». Con él se aconseja el disfrute de la vida antes de la llegada de la vejez.
    • La Descriptio puellae, descripción de la belleza ideal de la mujer.
    • El Beatus Ille o alabanza de la vida del campo, apartado de lo material, frente a la vida de la ciudad, con sus peligros e intrigas.
    • El Locus amoenus o descripción de una naturaleza perfecta e idílica.
    • La Aurea mediocritas, gusto y satisfacción por lo sencillo, lo que se posee... frente al deseo desmesurado de riquezas

Imitación y originalidad en la poética renacentista

El poeta renacentista se servía de los modelos de la Naturaleza, sobre esta base no ponía en duda la necesidad de imitar pues estos procedimientos se justificaban por proceder no de la reproducción de modelos, sino que del mismo espíritu que ha recogido otros pensamientos y se ha nutrido de ellos. Si lo ajeno, forzosamente disperso al ser múltiple, se vértebra y refunde en un organismo único, y si en este resplandece el espíritu del escritor, nadie podrá negarle el dictado de original.
Dentro del esfuerzo por establecer influencias, traducciones o adaptaciones, hay un componente de autocomplacencia ya que daba prestigio a quien las descubría. Esas rudezas eran en su mayor parte un rastreo que significó una pugna entre antiguos y modernos, para exhibir la propia cultura. El escritor de esa época asume la imitación como centro de su actividad. La originalidad absoluta constituye un ideal remoto que no se niega, pero no se postula exigentemente, porque es un privilegio concedido a poquísimos, y existe además la posibilidad de alcanzarla con el medio imitativo. En la imitación se debe acudir a varias fuentes que deben trasformarse y reducirse a unidad, es decir, convertirse al sentimiento personal que permite obtener el resultado patentemente original (no es la expresión pura del sentimiento, antes es un rodeo la memoria lectora).

Poesía amorosa

En la poesía lírica de la primera mitad del siglo xvi, la crítica reconoce varias corrientes paralelas que confluyen en dos grandes líneas.
  • Tradicional: que perpetúa los temas y formas procedentes de la tradición medieval. Recoge tanto la lírica tradicional (villancicos, cancioncillas de amor, textos romanceriles, etc.) como las de la poesía de cancionero del siglo XV en su vertiente amorosa y didáctica moral. Ligada al uso de metros cortos, especialmente el verso octosílabo.
  • Italianizante: más innovadora, introduce en España modelos poéticos de inspiración petrarquista vigentes en la Italia del Renacimiento. Refleja el desarrollo de las innovaciones de Juan Boscán y Garcilaso, según el patrón de la lírica culta italiana de su tiempo. Ligada al empleo del endecasílabo, soneto y de diversas formas estróficas derivadas de la canción petrarquista

CIRCUNSTANCIAS SOCIO POLÍTICAS DE LA NOVELA PICARESCA

               ¿Que circunstancias socio políticas explican de la novela picaresca en España?   Razones de índole literaria: la lírica ren...